El Desafío
A medida que Minihotel se expandía, atender a una clientela mundial se convirtió en su mayor desafío:
- Complejidad: Cada nuevo mercado requería navegar por los impuestos locales, las leyes y los complejos marcos jurídicos.
- Fricción y ventas perdidas: Los clientes experimentaban dificultades durante el proceso de pago en otros idiomas y monedas, lo que provocaba carritos abandonados, contracargos y un aumento de las solicitudes de soporte.
- Pérdida de ingresos: No se reintentaban de inmediato los pagos de suscripción fallidos, por lo que cada tarjeta rechazada se consideraba un cliente perdido.