¿Qué son los recursos de tamaño adecuado?

Al ajustar el tamaño de los recursos, modificas tu infraestructura en la nube en función de tu carga de trabajo real. El objetivo es gastar exactamente lo que debes y utilizar solo los recursos que necesitas. 

Debes utilizar el ajuste de tamaño para la rentabilidad; sin él, podrías gastar de más accidentalmente. También es una buena idea utilizar el ajuste de tamaño para que el rendimiento y la capacidad coincidan.

Estas son dos razones por las que necesitas utilizar el ajuste de tamaño:

• Sobreaprovisionamiento: asegúrate de pagar solo por la capacidad que utilizas. 
• Subaprovisionamiento: también debes asegurarte de no tener muy poca capacidad para no afectar tu rendimiento y la experiencia del cliente. 

Deberás centrarte en cuatro aspectos. Estos son: 

1. Monitoreo continuo: evalúa el uso de tus recursos y aumenta o disminuye según sea necesario. 
2. Ajuste dinámico: monitorea los cambios de demanda y escala tus recursos en función de estos. 
3. Para cargas de trabajo con patrones predecibles, considera utilizar proveedores que ofrecen instancias reservadas o planes de ahorro. 
4. Escalado automático: activa el escalado en función de los umbrales que definas de antemano.

Utiliza estas herramientas para dimensionar: 

• Monitoreo/análisis: observa las perspectivas dentro de tus paneles e informes para determinar qué debes hacer como próximos pasos. 
• Escalado automático: Establece condiciones predefinidas para ajustar los recursos en tu servidor. 
• Gestión de costes: Busca herramientas que te permitan hacer un seguimiento de tus gastos y determinar si tienes costes innecesarios. 
• Motores de recomendaciones: Identifica patrones de uso y considera si necesitas escalar hacia arriba o hacia abajo.

Esto depende de diferentes factores, como la naturaleza y la variabilidad de la carga de trabajo. Ajusta y monitoriza con más frecuencia si tu carga de trabajo cambia con frecuencia. Por otro lado, es posible que necesites revisiones periódicas si sabes aproximadamente cuál es tu carga de trabajo.

Independientemente de lo que hagas, debes establecer una ventana de revisión clara (por ejemplo, mensual). Durante estas revisiones, evalúa hasta qué punto están alineados tus recursos. Hacer esto es necesario si deseas mantener el rendimiento y, al mismo tiempo, optimizar los costes de tu nube.